Un SAI o Sistema de Alimentación Ininterrumpida es un dispositivo cuya finalidad es proteger y asegurar el funcionamiento de un equipo evitando que le afecten los cambios en la corriente eléctrica o el corte de esta.
Esto lo consigue gracias al uso de una batería que se activa en el mismo momento en el que se detecta un fallo o caída en la tensión, asegurando así que no se perderán datos ya que nos ofrece el tiempo necesario para guardar y asegurar nuestros archivos mientras se resuelve el problema.
Los equipos SAI se crearon inicialmente con un fin empresarial, como medida de seguridad para servidores, centros de procesamiento de datos, centros de cálculo o grandes empresas con gran cantidad de equipos electrónicos. Actualmente, su uso se ha extendido también al uso doméstico.
Existen tres tipos de equipos SAI:
- SAI offline.
Es el más sencillo y más barato, aunque no es el más recomendable teniendo en cuenta que no ofrece una protección muy alta frente a los cambios de tensión, sino que solo protege si esta se corta por completo.
- SAI interactivo.
Es el modelo más utilizado y recomendable. Este tipo de SAI ofrece tanto el back up o copia de seguridad de la batería para cuando no haya corriente e incorporan un filtro para reducir en la medida de lo posible los problemas que causan los cambios en la tensión eléctrica.
- SAI online.
Es el más completo y el más caro. Este SAI es capaz de realizar un análisis y filtrar la energía -convirtiéndola en energía “limpia”- transformando la energía alterna que entra en continua y una vez más en alterna, asegurando así una estabilidad en la corriente. Está más enfocado a un uso empresarial, pensado para evitar los problemas de corriente eléctrica en servidores que funcionan durante todo el día y que, por ello, necesitan la máxima estabilidad y protección.